Tras una reunión extraordinaria en Palacio Nacional con el Gabinete de Seguridad, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, condenó el asesinato de Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, Michoacán, quien perdió la vida tras sufrir un ataque directo a balazos la noche del sábado 1 de noviembre.
“Condeno con absoluta firmeza el vil asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo. Expreso mis más sinceras condolencias a su familia y seres queridos, así como al pueblo de Uruapan ante esta irreparable pérdida”, señaló Sheinbaum en un mensaje publicado en X.

Comunicación con autoridades de Michoacán
Sheinbaum Pardo también reveló que, desde que tuvo conocimiento del atentado contra Carlos Manzo, ha estado en comunicación con el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, y con el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, quien da seguimiento a la investigación encabezada por la fiscalía local.
“Hoy convoqué al Gabinete de Seguridad para garantizar el apoyo a Michoacán y que no haya impunidad. Los mandos territoriales de Defensa y Guardia Nacional mantenían comunicación con el alcalde y contaba con protección federal”, agregó la presidenta, adelantando que habrá una conferencia de prensa del Gabinete de Seguridad para ofrecer más detalles sobre los avances en la investigación.

El ataque ocurrió durante el Festival de Velas
Carlos Manzo fue asesinado la noche del sábado 1 de noviembre, mientras participaba en el Festival de Velas en el Centro Histórico de Uruapan, con motivo del Día de Muertos. Recibió al menos seis disparos de arma de fuego y, aunque fue trasladado a un hospital, perdió la vida.

Por este caso, dos personas fueron detenidas y una más abatida, presuntamente el hombre que disparó contra el edil.
Carlos Manzo había denunciado amenazas
El caso de Carlos Manzo tiene un contexto particular. Desde el inicio de su gestión como alcalde de Uruapan, manifestó su compromiso de combatir al crimen organizado, logrando la detención de varios presuntos integrantes de cárteles.
Sin embargo, en las últimas semanas, pidió públicamente ayuda a la presidenta Claudia Sheinbaum y a Omar García Harfuch, ante la ola de violencia que azota Michoacán.

“No quiero ser un presidente municipal más de la lista de los ejecutados que les han arrebatado la vida”, declaró Carlos Manzo días antes de ser ejecutado, ante la vista de cientos de personas y en presencia de su familia.




