El partido entre Querétaro y Chivas no estuvo exento de controversia, con una jugada polémica en el cierre del primer tiempo que desató la furia del banquillo y los jugadores del Guadalajara. La acción, que podría haber cambiado el rumbo del encuentro, puso nuevamente bajo la lupa la actuación arbitral y el uso del VAR.
Corría el minuto 44' cuando la ofensiva de Chivas generó una clara oportunidad. 'Cotorro' González desbordó con peligro por la banda izquierda y lanzó un centro con dirección al área. Sin embargo, el balón no llegó a su destino, impactándose directamente en la mano del mediocampista de Querétaro, Jaime Gómez.
Inmediatamente, los jugadores de Chivas rodearon al árbitro central, Maximiliano Quintero Hernández, reclamando airadamente la pena máxima. Pese a los intensos reclamos, la decisión inicial del silbante fue indicar únicamente un tiro de esquina, desestimando la opción del penal.
La tensión se mantuvo mientras se esperaba la revisión protocolaria. Tras una "revisión silenciosa", el VAR determinó que no existía razón para conceder la pena máxima a favor de Chivas. Ante la confirmación desde la cabina, el árbitro Quintero Hernández decidió que no era necesario dirigirse al monitor de campo para revisar la jugada personalmente.
La decisión de no pitar el penal y la posterior validación del VAR generaron un notable descontento en el conjunto tapatío, dejando la sensación de que se les privó de una oportunidad clave, pues desde el minuto 1 estaba abajo en el marcador y ese posible penal era la oportunidad de empatar el partido.
Chivas y los penales este AP25
La frustración del Rebaño Sagrado se magnifica por la 'mala fortuna' que han tenido con las penas máximas durante esta temporada. El no haber conseguido el penal ante Querétaro solo añade un capítulo más a su preocupante racha desde los once pasos.
En lo que va del torneo, Chivas ha sido castigado con seis penales en contra, una cifra que subraya la fragilidad defensiva en el área y que los coloca entre los equipos más sancionados.
La situación es igual de sombría en el aspecto ofensivo. A pesar de los reclamos y oportunidades generadas, al Guadalajara solo le han señalado tres penales a favor en la temporada. Lo más alarmante es su falta de contundencia: de esos tres tiros, el equipo solo ha logrado convertir uno en gol, fallando los otros dos.
