Sol, playa y arena son algunos de los elementos que comenzaron a forjar la carrera de Jorge Campos, baluarte del balompié mexicano. Ahora, el histórico exjugador de Pumas fue captado en las playas de su natal Acapulco entrenando a su hijo, de la misma manera que él lo hizo antes de dar una irrupción en el futbol internacional.
'El Brody', 'El Inmortal' o simplemente Jorge Campos maravilló al mundo entero con sus grandes atajadas y uniformes vistosos, pero lo que siempre llamó la atención fue su capacidad para defender el arco. El guerrerense lo dejaba todo para defender los tres palos y, aunque algunas veces regaló un par de pifias, la mayoría eran jugadas circenses.

El legado de Jorge Campos
Jorge Campos llegó a Pumas en 1988, más por obra del destino que por una simple casualidad. En el conjunto auriazul destacó por ser un jugador multifuncional, pero no por los términos de ahora, sino por una locura sin igual casi nunca vista.
Campos jugó como arquero, pero también como delantero, en el que sus dotes como ariete eran casi similares a sus reflejos como portero. De los dos lados del campo era peligroso, acrobático de frente al arco pero también para defenderlo, una especie de Deion Sanders, sin saber quién de los dos era más carismático.

¿Su hijo continuará su legado?
El joven que está en las playas de Acapulco junto a Campos es su hijo Kai Antonio Campos, de tan solo 19 años. Su hijo, a diferencia de su padre, no nació con el calor de las playas del Pacífico, sino en un clima bastante gélido a comparación.
Kai nació en Canadá y ha jugado en dos clubes, sin embargo ninguno dentro de la Hoja de Maple. El joven que juega de mediocampista, aunque también mostró dotes de arquero, es futbolista del Cal State Fullerton, una Universidad pública de California.
En caso de destacar y mostrar grandes aptitudes como su padre, el jugador podría llegar a la MLS y comenzar a escribir su propia historia. Sin embargo, la losa y el nombre es muy pesado, pues Jorge Campos no es cualquiera, es un inmortal dentro del balompié mundial.





