Portugal derrotó en casa a Irlanda con un solitario gol de Rúben Neves, en un partido que fue completamente de los lusitanos. Cristiano Ronaldo tuvo la gran oportunidad de romper el récord de Carlos 'Pescadito' Ruiz, de máximo goleador en Eliminatorias Mundialistas; pero Caoimhín Kelleher tuvo una noche excelsa en Lisboa.
El conjunto lusitano comenzó el encuentro con una presión alta, pero el cuadro irlandés se encargó de defenderse con uñas y dientes. 'El Comandante' tuvo la primera gran ocasión clara al 16', con un disparo cruzado que terminó en el palo Kelleher.

Portugal continuó con la presión, pero el Estadio Jose Alvalade entró en uno de los momentos más emotivos con un minuto de aplausos al 21', en honor a Diogo Jota. Ante el gran envión anímico de los portugueses, el cuadro luso inició una auténtica revolución en el terreno de juego, pero sin muchos dividendos de por medio.
Al minuto 41, en un tiro de esquina, Gonçalo Inácio peinó un balón que estuvo a nada de entrar en la portería de Kelleher, pero una vez más, el arquero del Brentford sorprendió con sus reflejos. Bernardo Silva se animó poco tiempo después de aquel córner, pero la zaga irlandesa despejó sin mayor problema.

Segundo tiempo de alarido
En el complemento, la figura de Kelleher se hizo aún más grande, mientras que los aficionados guardaron silencio en varios momentos clave. Cristiano no tuvo una, ni dos, ni tres, sino hasta cuatro jugadas en la segunda mitad, pero la más clara fue desde el punto penal.
Dara O’Shea cometió una imprudente mano en el área y 'El Bicho' tomó el balón para disparar pero Caoimhín volvió a ser factor. El disparo de Ronaldo fue al centro, pero la pierna del arquero desvió la trayectoria y le impidió al astro superar la barrera de los 39 goles en Eliminatorias.

¿No Cristiano? Rúben Neves salva a Portugal
Tras el error del capitán luso, Portugal lució desconcentrado, pero con más ganas que futbol, fue a buscar el partido. Los últimos minutos no dejaron mucho y cuando todo parecía que iba a terminar en un empate, Rúben Neves apareció.
Francisco Trincão mandó un centro preciso para el jugador del Al Hilal, quien metió un verdadero testarazo a la bola. Neves, con los sentimientos a flor de piel, corrió hasta el banderín y le dedicó el festejo a su compañero y amigo Diogo Jota, quien siempre será un protagonista intangible del futbol lusitano.





